Preciosas palabras escritas por un papichino, compañero de la listas de correo de afac:
Se adopta por deseo. ¿no? Porque el que es estéril en sus entrañas, es fértil en su corazón y todo lo que en ese corazón guarda, desea darlo.Porque el que es fértil, el que ya tuvo hijos de su vientre, cuando decide adoptar, algo le dice que hijos, en su corazón, todavía guarda. Porque el que los tuvo bajo su corazón y ahora los tiene, de un corazón ajeno, aprende que: el amor incondicional no conoce sangre. Solo conoce de corazones idénticos pero de tamaños diferentes que se quieren dentro de cuerpos morenos, rosados o cobrizos; de abrazos, de besos, de cosquillas bajo el edredón compartido en domingos, ¡que para eso no hay cole!; de olores a pan tierno; a goma de borrar…
El que nunca tuvo hijos de su sangre, deseó y aprendió, con humildad, lo hermoso que hubiese sido, también, tenerlo en su vientre y no perderse tantas y tan hermosas sensaciones. Hay sonidos, pataditas, cambios, movimiento… Porque sabe que tenerlos desde tus adentros es tan bueno, tan hermoso y tan grande como desde fuera ha sido haberlos tenido.
En definitiva: se adopta, porque un día flotó en el aire un deseo y seguro, que mil razones. Un deseo, mil razones y cuatro abuelos que, seguro, seguro, seguro y aunque no lo digan, a estas alturas de sus vidas, descubren ¡ya ves tú!, gracias a los hijos de su sangre, que “dar a luz”, se puede dar, hasta desde muy lejos.
digo yo... no se...
miércoles, 29 de octubre de 2008
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